LICENCIA: MPL-17062/25779 (Especialista en cirugía plástica y reconstructiva).
El Dr. Dainius Daunoravičius trabaja en este campo desde 2007. Es miembro de la Sociedad Lituana de Cirugía Plástica y Reconstructiva, de la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS) y de la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos (ASPS). El cirujano se graduó en la Facultad de Medicina de la Universidad de Vilnius, luego completó sus estudios de doctorado y obtuvo el título de médico. Entre 2007 y 2016, impartió clases en la Facultad de Medicina de la Universidad de Vilnius. El cirujano mejoró sus conocimientos y experiencia en cirugía plástica y reconstructiva mediante prácticas en Suiza, Suecia, Dinamarca, Finlandia, Turquía, Francia, República Checa, Letonia, Estonia, Alemania, Bélgica, Italia, Japón y el Reino Unido.
El cirujano D. Daunoravičius y su esposa Ieva, ginecóloga obstetra, tienen cuatro hijos: Ūla, Bernardas, Leonas y Vincentas.
El cirujano D. Daunoravičius proviene de una familia de varias generaciones de médicos, profesores y artistas de diferentes especialidades. La medicina, el arte y la música acompañan a Dainius desde que era un niño. 'De niño, frecuentaba los departamentos del hospital donde ejercían mi padre y mi abuelo, y su importante labor como médicos me dejó una gran impresión. También solía pasar mucho tiempo en el taller de otro abuelo, profesor de la Academia de Bellas Artes, donde juntos modelábamos y moldeábamos esculturas de yeso. Por eso, cuando descubrí la cirugía plástica, que percibo como una síntesis de arte, ciencia y medicina, no tuve ninguna duda', describe el Dr. D. Daunoravičius su vocación. 'Últimamente, en el taller de mi abuelo, hemos estado revisando libros de arte sobre esculturas de diferentes épocas: desde la antigüedad hasta el arte moderno. Aprendí a modelar el cuerpo humano con ellos y tuve conversaciones con mi abuelo sobre las proporciones ideales y la forma de los labios, la nariz y las mejillas. "Los perfeccionamos sobre moldes de arcilla o yeso y observamos cómo cambia el rostro a medida que lo vamos armando. Es muy interesante y útil porque, al fin y al cabo, es similar a lo que hacemos en el quirófano", añade el cirujano.
"La cirugía plástica es mi trabajo y mi ocio, así como un gran campo de mejora continua. Los conocimientos más recientes, las nuevas posibilidades y el dominio de las técnicas y tácticas quirúrgicas innovadoras son especialmente importantes para las personas que trabajan en nuestro campo. Por eso hago prácticas en clínicas extranjeras al menos cinco veces al año y me suscribo a la literatura científica más actualizada. Creo que el mayor placer para cualquier especialista en cirugía plástica y reconstructiva es la oportunidad única de cambiar positivamente la forma de sentir del paciente", afirma el cirujano. Sostiene que la cirugía plástica no tiene nada que ver con la satisfacción de los propios caprichos, sino que es la realización de expectativas legítimas y, con frecuencia, incluso una necesidad de la vida humana.
“Al solucionar un problema físico, ayudamos a solucionar problemas psicológicos y a desarrollar la autoestima al mismo tiempo. Los resultados se ven claramente en las visitas postoperatorias, cuando los pacientes llegan con caras radiantes, felices y seguros de sí mismos. Es un gran placer ver esa armonía resultante de los cambios tanto en el interior como en el exterior, ya que este es el mayor mérito de nuestro trabajo”.