De niño, la carrera que más deseaba era ser médico porque quería ayudar a los demás, devolver algo a la sociedad y ofrecer algo bueno a mis semejantes. Cuando crecí, me convertí en médico, como siempre había soñado.
Durante mi etapa como estudiante de medicina, desarrollé una fuerte pasión por realizar procedimientos porque lo disfrutaba y era bueno en ello. Después de graduarme, tuve la oportunidad de continuar mis estudios en cirugía debido a mi interés en realizar diversos procedimientos y a mis rasgos personales de cuidar a todos, tratarlos de manera justa y enfocarme en lograr los mejores resultados para mis pacientes. Escucho lo que quieren mis clientes, analizo su estructura y realizo los procedimientos que mejor se adaptan a sus necesidades.
Esto me llevó a abrir esta clínica con la intención de conseguir que quienes se sometan a una intervención quirúrgica queden “satisfechos” y salgan con “una sonrisa y una confianza renovada”.